miércoles, 11 de agosto de 2010

EL CORTO, la película que nunca se hace larga

Todos los sabemos y todos los hemos usado el cine en el aula, y suele funcionar bastante bien. Es uno de las artes que mejor acogida y difusión tiene entre el público general. En su formato más reducido suele funcionar igualmente muy bien. En este caso quiero proponer un cortometraje que he usado varias veces en el aula y que suele funcionar muy bien es el de Nacho Vigalondo… Se puede hacer una introducción del director, con su primera película (consultando la propia página del autor, si queremos Wikipedia, su blog en el periódico EL PAÍS. Si queremos ampliar un poco más y no centrarnos solo en este director, se puede introducir a otros nuevos directores de cine (noveles, que sólo han hecho un película hasta ahora y casi todos con éxito en su ámbito) que están con esa primera película, hablar un poco de esta heterogénea nueva generación. Hay un artículo en el país de este último mes bastante útil para este previsionado.

La actividad se puede realizar tanto en clase como online, en el caso de que usemos el blog, es muy recurrente como tarea para casa. Lo ideal sería combinar el trabajo en clase, con el online y con una tarea final en clase. El líneas muy generales, la sinopsis del cortometraje es lo que puede hacer uno por amor. Veámoslo:



Si el trabajo se realiza únicamente online, se les pide a los alumnos que de manera anónima (así suele funciona mejor) nos cuenten qué los peor, lo mejor, lo más divertido, que han hecho por amor o viceversa, lo que han hecho por él/ella (también se les puede dar la opción de hablar de temas relacionados como una declaración de amor, una ruptura, una flechazo, un chulazo/a…). Al ser anónimo al trabajar con las comentarios anónimos se tratará de que cada alumno trate de adivinar a quién corresponde cada experiencia. 

Si en cambio, se trabaja también en clase en clase con este material (en papel, en pizarra digital, en pocketpcs, etc), suponiendo que los alumnos ya se conocen bastante, se les hace trabajar en pareja y que decidan quién es el autor de cada comentario. Una vez que se ha establecido el autor de cada historia, se establece un debate en torno a las historias y a otras que pueden surgir. En esta parte suelen surgir anécdotas divertidas y los alumnos suelen divertirse bastante. Este actividad la uso como refuerzo para las expresiones de comparación y refuerzo de los comparativos y los superlativos, también se puede usar para muchas más destrezas.

Como actividad final les propongo que en grupos de cuatro, teniendo en cuenta todo lo que hemos trabajado anteriormente, escriban un decálogo de cuáles son las mejores y las peores maneras de declararse a una persona. Luego se leerán en clase las propuestas y mediante votación se llegará a un doble decálogo final elaborado por todo el grupo.